No sé por qué nos empeñamos en no entender al otro. Parecemos que somos pura ficción y no, no somos ficción, somos sumas de realidades.
Lo que suele ocurrir es que la realidad a veces es tan cruda, tan verdad, que nos inventamos alguna ficción. Lo que seguramente quisiéramos protagonizar como si lo que hiciéramos fuera real.
La vida que denominados cotidiana, la que nos sucede a la mayoría de los mortales no es como la de algunas personas que pensamos son importantes porque tienen objetos y dinero abundantes y creemos que eso es lo prioritario en la vida.
Han triunfado -decimos- tienen de todo, casas, coches, aviones privados, muchas personas a su servicio, etcétera.
Entonces nos damos cuenta que no podemos compararnos con ellas, además, intuyo no sería ético.
Tenemos que situarnos en un mismo plano. Pienso que existen las publicaciones llamadas 'rosa' en donde insertan grandes fotos y textos para que envidiemos a los 'famosos'
Generalmente viven muy bien -o eso nos hacen creer- pero yo creo que no pueden caminar por cualquier calle sin que sean reconocidos.
Esa es la libertad que tenemos los que no poseemos 'fama' ni grandes fortunas.
Por eso, tenemos que hacer constantemente ejercicios para poder entender al otro.
Amigo Javier, sería muy bonito y muy grande que el género humano entrase en razón y reinará la felicidad; tu sabes amigo Javier que mientras en el mundo existan las grandes desigualdades, no se van a terminar los conflictos y las guerras.
ResponderBorrarRepito, sería maravilloso lo que tu dices: mirarnos los unos a los otros con más tolerancia,gentileza y paciencia, tratando siempre de entender al otro para ayudarnos mutuamente.
Un abrazo.
Tú bien lo dices sería muy bonito. Esperemos que algún día sea posible además de bonito
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