A medida que voy surcando el camino de la vida, tengo la sensación de que me adentro en la nada.
Me estoy acostumbrando al tiempo de todas las dictaduras, a la amistad, a la madre de la complicidad de la vida y a la nada de algo que quise conquistar y ya no es posible llegar.
La nada me llega a través de los libros, esa sensación de que me están contando lo imposible, solo, quizá lo virtual, lo efímero, lo nauseabundo de los que hacen las reglas son los que no tienen que hacerlas.
Tengo esa sensación agria y a veces vomitiva de que todo está en la nada.
Todo es vacío, han deshuesado el cuerpo de la sociedad y ya triunfa la nada.
Creo que tengo un insomnio crudo y real. La nada.
Amigo Javier:
ResponderBorrar¿Qué es la nada? acaso encuentras la "nada" cuando ves que, por mucho que busques hasta en los sitios más recónditos, no te llena de satisfacción por la sensación de vacío. Quizás la "nada", esté en la consecuencia de una sociedad acomodada, adormecida que no admite sugerencias ni cambios en las reglas de la sociedad; "lo peor que pueden hacer los hombres buenos, es no hacer nada". Así, todo seguirá igual y quedará en "nada".
Un abrazo fuerte.
Un fuerte abrazo, amigo Vicente.
ResponderBorrarGracias mil por tu comentario.