Hay días que piensas seriamente que no deberían haber comenzado.
Pero pese a todos los esfuerzos que haces, el día tozudamente continúa.
Entonces te das cuenta de que, aunque tú lo intentes, la única realidad es lo que pasará.
Y así, poco a poco van acaeciendo los acompasados segundos que inexorables se convertirán en minutos y por supuesto esos minutos en horas.
Cuando nos decimos 'así nos va la feria' realmente no sabemos cómo nos va en esa realidad, que es la vida.
Creyendo que soy libre, paseo por el parque más cercano y de repente, me creo que soy el rey del mundo.
Si, efectivamente soy libre para pasear, pero no soy tan libre como para quitarme de la mente los problemas que se me han enquistado. No soy libre.
Como un robot programado por otras mentes surco los senderos del parque absorto en esos problemas que no puedo borrar fácilmente.
Decido entonces esbozar un apunte rápido para intentar olvidar lo que me sigue golpeando en mi cabeza.
Me parece divertido lo que me sucede, aunque en realidad, no veo la gracia por ninguna parte.
Recuerdo -como un fogonazo- que dejé encendida la lámpara que ilumina mis lecturas y siento necesidad de tener poderes para apagarla desde el parque, solo con mi mente.
El caso es que veo a una pareja en un banco mirándose amarteladamente y de inmediato me digo: la lámpara que ilumina mis lecturas.
Amigo Javier, el amor tiene un poder inmenso, a pesar de haber tanto odio y sufrimiento en el mundo sigue ganando el amor; no quiero pensar que en este mundo desaparezca el amor y reine el odio; sin amor no podriamos existir, el amor está hasta en las piedras; sin amor no hubiésemos tenido a nuestros grandes poetas; el amor es el fundamento de la vida de todos los seres racionales, animales y vegetales.
ResponderBorrarAmigo Javier, me has inspirado con esta frase que finalmente has dicho: la pareja que estaba sentada en un banco se miraban "amarteladamente" y que verdaderamente esa era la lámpara que iluminaba tus lecturas
¡¡Gracias Javier, eres único. Un abrazo muy grande.!!
Muchas gracias Vicente. Me entiendes perfectamente.
ResponderBorrarUn abrazo fuerte amigo Vicente.