En siete horas

Claude Juncker

Un escándalo de espionaje ha llevado a dimitir a Claude Juncker  -a la sazón primer ministro de Luxemburgo-  durante nada más y nada menos que diez y ocho años (18), un verdadero récord de permanencia en un cargo político en Europa.

La pérdida de confianza ante el parlamento de este país se ha producido después de un debate que ha durado siete (7) horas. Los servicios secretos de Luxemburgo cometieron irregularidades con escuchas que afectaron al propio Juncker y también al Jefe de Estado, el gran duque Enrique.

En la legislación de ese país, es el propio primer ministro el encargado de la inteligencia; hay que dejar constancia que Juncker había negado anteriormente todo lo que se le imputaba, pero después de este debate en el parlamento, se sintió acorralado y decidió presentar la renuncia al cargo, estas han sido sus palabras: "He convocado al Gobierno mañana a las diez y presentaré la dimisión del Gobierno al gran duque".

Todo esto viene al caso (no puedo remediarlo) por las cosas y casos que en nuestro país suceden y están sucediendo. Ya se que no se debe comparar y menos generalizar en temas políticos de distintos países,  pero voy a manifestar los siguiente:

• La Cámara de Luxemburgo consiguió lo que en las urnas no han hecho durante 18 años.
• Las irregularidades e ilegalidades  se pagan al menos políticamente;  hay que adelantarse a la Justi
• Los servicios de inteligencia (en este caso de nombre SREL) tienen que estar al servicio de los ciudadanos, pues entre otras cosas es quien lo paga. 

Como colofón final a mi reflexión me gustaría que algo así ocurriese en mi país en siete horas.