Bloqueo

Lo confieso, estoy bloqueado, es más, cuando me he puesto a deslizar el bolígrafo sobre mi libreta de anotaciones, no lograba juntar ninguna palabra que diera un sentido de lo que quería expresar.

En definitiva, bloqueo. Entonces me he puesto con ahínco por qué me estaba ocurriendo esto y he llegado a una primera conclusión: agotamiento. Agotamiento del baile de estupideces y memeces de unos y otros, de esto que llamamos arco parlamentario.

Sí, ya sé que esto, que nos está ocurriendo, no nos había sucedido nunca, después de unas elecciones generales desde que nos dimos una Carta Magna desde el 78.

Amigas y amigos ¿no estáis agotados de este ir y venir, foto va, foto viene, regalito, por aquí, por allí, apretones de manos (que ya algunos deben de sufrir tendinitis), en fin, esta especie de locura en donde el tiempo está jugando su baza indiscutible, deberían sus señorías ser un poco más serios y de verdad, ceder hasta conseguir llegar a un acuerdo para, en definitiva, que nos gobiernen de una vez por todas, que para eso le hemos dado unas actas, sencillamente, para que conduzcan a este país que ya ha sufrido bastante durante estos últimos años.

Se sienten, ya de una vez, sin postureos de unos y otros y lleguen a un acuerdo para desatascar tanta vanidad y egolatría que llevan encima y no quieren quitarse.

Se sienten, y piensen, que para algo les hemos dado un contrato, para que sean servidores públicos y lleguen a hacer políticas para que esta nación salga de este agujero negro, y nos dejen las naciones de mirarnos con asombro, que ya han pasado muchos días sin resolver lo que hay que resolver.

A ver si me quitan este bloqueo.