Las cúpulas

Cúpula de la catedral de Florencia

Cuando era más joven por los motivos que luego fui descubriendo, me fascinaban las cúpulas de las catedrales, iglesias y cualquier edificio que tuviera algo que para mí era difícil de entender: cómo habían construido en aquellas épocas  estructuras tan bellas que todavía aún me asombran.

Pero estoy muy desilusionado por el descubrimiento mucho más reciente de lo que es una cúpula política de un partido.Resulta que los que dirigen el 'cotarro' de los partidos lo denominan cúpula.

Y ahora es cuando se me ha derrumbado todo el sentido arquitectónico y artístico de las cúpulas de las catedrales. La idea que imperaba  en mi mente con ésos cálculos que hacían los grandes maestros en aquellos tiempos, se me ha borrado de repente.

Al parecer una cúpula política es muy importante. Lo estamos viendo en el caso del Partido Popular. Aunque da lo mismo en los otros partidos también al parecer son importantes.

Don Mariano en un monitor de plasma, nos plasmó su inocencia y la de su cúpula en un discurso leído y sin poder preguntarle nada, ya que los periodistas estaban en otra habitación.

La cúpula del Partido Popular se tragó literalmente la intervención. Hubiéramos querido que los periodistas de la otra habitación hubieran podido hacer alguna que otra pregunta -como siempre con mucha educación y orden-  para poder saber lo que nos interesa y no lo que Don Mariano nos soltó.

Supongo que cuando se vea con Merkel no se presentará a la rueda de prensa con su plasma.

A los ciudadanos de a pie, es decir a la mayoría, no nos interesa para nada que nos cuente que la auditoría interna no encontró nada anormal, faltaría más siendo hecha por la casa.

Yo personalmente hago cada mes una auditoría en mi casa por los gastos acaecidos en la misma y nadie me dice nada en contra ni encuentra nada anormal. Lógicamente tampoco dicen nada de los ingresos.

Don Mariano, usted se ha equivocado de monitor de plasma y nos ha dejado 'pasmaos' a todo bicho viviente, que somos la mayoría que usted gobierna y no tenemos nada que ver con su cúpula.

Me está usted desilusionando tanto que me está produciendo en mi ser un insomnio considerable.

Pues ¿sabe lo que le digo?, que no me hace ninguna gracia.