De vergüenza

Allá por el año 2007, el sistema de Dependencia se puso en marcha en España.

El llamado cuarto pilar del Estado de Bienestar, según datos oficiales publicados por el IMSERSO (Instituto de Mayores y Servicios Sociales) en septiembre de de 2013, existen 2.338 usuarios menos que cuando Mariano Rajoy, se encontró cuando asumió el poder; entonces eran un total de 738.587, es decir ahora son 736.249.

Me apresuro a indicar que no son números solamente, que representan cada uno de ellos a personas de carne y hueso como el que está ahora escribiendo esto.

Dato que me produce vergüenza que en pleno Siglo XXI, tengamos que hablar de este tema. Las nuevas altas son inferiores al número de personas que fallecen. El Ministerio de Sanidad , Servicios Sociales e Igualdad, indica que este año (2013) ha habido 60.879 altas en el sistema. Pero esta cifra es engañosa ya que los beneficiarios de la Dependencia (esto es, personas con ayudas) muestran una caída. El saldo final hasta septiembre de 2013 es de 15.302 usuarios menos, por lo que el número de bajas en el sistema (beneficiarios fallecidos) en este período ha sido de 76.181 ( 60.879 + 15.302).

Está muy claro que la culpa de estas cifras (personas) la tienen sin duda los recortes propiciados a este colectivo por el Gobierno de España actual.

El Real Decreto Ley de julio de 2012, supuso el golpe más importante a las aportaciones que transfiere el Estado a las Comunidades Autónomas (que son las ejecutoras de la ley). En este Real Decreto Ley, se acordó la del nivel mínimo en un 13%, la minoración del 15% de las cotizaciones a la Seguridad Social de los cuidadores o la reducción de la compatibilidad entre servicios. 

¿Así tratan a los dependientes? ¿Son ciudadanos de segunda? ¿Esto es un Estado de Derecho? ¿O es un Estado de Deshecho?

De vergüenza.