Ya es prácticamente un axioma. El Gobierno de Mariano Rajoy Brey plantea nuevas fórmulas para recortar gasto en pensiones. Palabra de Rajoy : "no voy a tocar las pensiones". En román paladino quiere decir que para ganar unas elecciones generales allá el 20 de noviembre de 2011, hay que mentir como un cosaco y arrastrar los nombres de sus antecesores en el cargo por el teatro del miedo. Así consigue el poder sin ningún remilgo.
"¡Que se jodan!", expresión que se queda corta, es sólo una floritura del calentón en sede parlamentaria de una diputada con apellido 'ilustre'. Ahora no se tocan los impuestos, pero me toca la pensión. En cualquier país democrático esto ya de por sí hubiera derribado sin más al político de turno, por mucha euforia y engolamiento soberbio que se ponga, ya que hay que servir los intereses de eso que se han inventado para la grey europea que llaman troika.
Llamarse España no significa nada, ya que nos engañaron vilmente con técnicas del miedo en que teníamos que entrar en la Unión Europea o era nuestra perdición. Que yo sepa el Reino Unido, Dinamarca, Suecia y Noruega no ha sido su perdición y muy al contrario están sorteando mucho mejor la crisis que la UE.
En este mundo de trileros nunca se sabe qué capítulo de la obra del miedo es más importante. Pero eso sí, había que bajar el déficit para poder 'crecer con sostenibilidad'. Si, eso si ha entrado en nuestras míseras vidas. Tanto recorte por mor del reino de la sostenibilidad, pues habíamos vivido por encima de nuestras posibilidades, marchitas ya por la podedumbre de los dineros para tapar las fechorías y latrocinios de los bancos privados, si privados, que pueden ellos solitos 'crear dinero' y seguir hundiendo la economía de la llamada clase media. Aquí no pasa nada. Tenemos para rato el que por ejemplo Rato pague su buen hacer en Bankia. Es sólo un ejemplo, pero existen mucho más, tantos que me da vergüenza como ciudadano elaborar la lista de indecentes y sinvergüenzas robando según la ley.
Para rematar la enjundia de este gobierno que se llenó la boca en los mítines que lo iba a arreglar todo, ahora nos tocan las pensiones. Ya no son las quitas de las ayudas a la dependencia, tan necesitadas para muchos, ahora no contento con cargarse la Sanidad y la Educación públicas, arremete con las pensiones. Mientras millones de euros desaparecen en los paraísos fiscales. Aquí no pasa nada.
Ya no tienen ética, ya no tienen entrañas, por no tener no tienen nada de nada, ni vergüenza. Esto si que es un 'escrache' en toda regla, para una parte muy importante de la población que en sus días se dejaron casi la vida en conseguir sacar adelante a sus familias y pagando sus impuestos, para tener una digna vejez. Nuevas fórmulas, nuevos sacrificios.
Javier, ya no se puede decir escrache, hay que decir acoso. Es tambien una nueva fórmula, ya sabes. Lo que no se nombra no existe
ResponderBorrarExacto, estoy escrachado con un acoso de mil pares de pelotas.
ResponderBorrarGracias por tu certero comentario.